Hay calzados de calzados y luego están las Adidas Superstar; al igual que sucede con las Converse, este modelo ha logrado mantenerse en la cima por más de 3 décadas. Estas zapatillas nacieron para ser las monarcas de las canchas de baloncesto, pero terminaron reinando las calles de todo el mundo.
Las generaciones más recientes asocian el nombre de Adidas Superstar al grupo de rap Run DMC de Queens, cuando subían al escenario ataviados con exclusivos chándales de cuero y estas emblemáticas zapatillas. Pero antes de que marcarán la historia del rap, estos sneakers se diseñaron con otro objetivo: adueñarse de las canchas de baloncesto.
Nuestras zapatillas favoritas nacieron en 1965, aunque originalmente no recibieron este nombre, sino que eran conocidas como Adidas Supergrip, a día de hoy podemos ver en su diseño rasgos del primer modelo, el más característico es su famosa puntera en forma de concha que tenía como función principal proteger los dedos de los pies de los pisotones del equipo rival.
Otro dato interesante es que en los primeros modelos de Supergrip no se añadió refuerzo, fueron los primeros jugadores que la probaron y le pidieron a la compañía alemana que hiciera algo, para salvaguardar la pequeña zona del pie que se encontraba expuesta a golpes. Tiempo más tarde, las nuevas generaciones de Supergrip adquirieron otras características que se mantienen en las Superstar, la suela vulcanizada, es una pieza que no solo mejora el agarre a las pistas, sino que además resultaba más barata en su fabricación.
Adidas vs Converse
Adidas siendo una compañía alemana creó las Superstar para triunfar en el deporte más popular de los Estados Unidos. Sin embargo, a pesar de que su diseño ofrecía mejoras a los jugadores su popularidad no fue nada espectacular, ya que las canchas de la NBA ya tenían un líder, las Converse.
Pero las Converse a pesar de ser el calzado que queda muy bien a estrellas de rock y ciudadanos comunes tenían en la cancha una serie de problemas que hacían que los jugadores tuvieran lesiones de tobillo y rodilla. Así que las Superstar ofrecían mayor protección y un mejor agarre, pero a pesar de eso no lograron el éxito inmediato; su fama fue creciendo gracias al desempeño de Chris Severn.
Severn se tomó la tarea de visitar todos los vestuarios y gimnasios de los equipos de la NBA con una maleta llena de Adidas Superstar, para que de esta manera los jugadores pudieran comprobar a través de la experiencia las bondades de esta nueva zapatilla. En el libro Sneaker Wars, Severn dice “Habían jugado con zapatillas de lona toda la vida; las Superstar parecían completamente ajenas a ellos […] Converse no les pagaba; solamente se habían acostumbrado a jugar así con ellas”.
A esta jugada maestra se le sumó que Severn, lograra convencer a sus jefas e intentaran fichar jugadores para que llevaran exclusivamente estas zapatillas. De esta manera, en 1976 consiguió que el jugador más destacado de la época llevara las tres rayas emblemáticas, Abdul-Jabbar aceptó $25.000 dólares al año, convirtiéndose en el primer baloncestista con un acuerdo de patrocinio con Adidas.
La segunda era
A principios de la década de 1980, Adidas empezó a cambiar los materiales de fabricación, pasando por el cuero, el fieltro y el ante. También, se les hizo un poncho más ancho pensando en el mercado estadounidense, en el que las zapatillas que empiezan a estar de moda eran más grandes.
Esa anchura extra aporta comodidad, clasicismo y elegancia de su silueta. Esto llamó la atención del grupo Run-DMC haciéndolas sus sneakers oficiales, el grupo comenzó un movimiento estético, con una ola de seguidores vistiéndose igual que ellos. El éxito fue rotundo al igual que el amor de los raperos por sus sneakers, estos los llevó a dedicar una canción para rebelarse contra la imagen estereotipada de la estética de los barrios marginales, la canción lleva por título My Adidas.
Un hecho interesante que merece mención es que Run-DMC ofreció un show en el Madison Square Garden de Nueva York, en 1986. En aquel show, la banda pidió a los 40.000 asistentes que se quitaran las Adidas y se las enseñaran. Y muy pocos fueron los que no levantaron unas Superstar.
Del rap al lujo
En 1990 llegó la introducción de las Superstar II, la actualización del calzado, nace con el traslado de la producción a Asia y la adición de relleno adicional. Patinadores como Keith Hugnagel y Mark Gonzales usaban las Superstar en un tiempo que pertenecía a las Vans.
El cambio de siglo trajo consigo que el streetwear llegara al mundo del lujo, por lo que las Adidas mantuvieron su protagonismo con ediciones especiales firmadas por BAPE. En 2019 sufren una reinterpretación de la firma italiana Prada.
Desde su lanzamiento original, estas Adidas han sido lanzadas en casi todos los colores imaginables, han experimentado múltiples colaboraciones con artistas y diseñadores. Aún así, su diseño no ha sufrido alteraciones, por lo que es un calzado clásico y atemporal.