El arte de los Rayos X reúne a Bally, Shok-1 y Swizz Beatz

Bally

Este otoño, lo mejor del arte callejero británico choca con el mundo de la ropa deportiva de lujo suiza en la última edición en colaboración entre Bally y el aclamado artista Shok-1, pero también se suma Swizz Beatz, el productor musical ganador de un Grammy y empresario global.

The wearable-art o el arte acicalado de Bally

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La colección se lanzó con una presentación de estilo de calle que comenzó el 10 de octubre, seguida de la distribución exclusiva de los productos en las tiendas Bally de todo el mundo, en su sitio web y a través de sus socios mayoristas seleccionados hasta el 30 de noviembre de 2018, o hasta agotar la existencia. Un lanzamiento dinámico que resonó a tono con las experiencias que hoy dirigen al consumidor en esa búsqueda por un estilo único en productos de alta gama y especial demanda.

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La colección unisex perturbadora y convincente de Shok-1 se estrenó a nivel mundial en el hogar de la ropa deportiva de vanguardia: Tokio, Japón, con una serie de eventos electrizantes: el área de Shibuya acogió la primera gran escala de Shok-1 en un mural, mientras que el último piso del buque insignia de Bally en Ginza, fue transformado en un espacio de galería emergente, con obras seleccionadas de Shok-1 y abierto al público durante las siguientes 4 semanas. Para el cierre, se espera una fiesta privada de mucho nivel a la que asistirán VIP´s y celebridades que subrayan la visión de Shok-1 para crear una colección que habla de la «larga tradición de subculturas donde cohabitan las marcas”.

Shok-1

Desde su plataforma de lanzamiento en el Lejano Oriente, la colección de Shok-1, con su exclusiva estética de rayos X, permitió a los amantes de los nichos escoger sus productos favoritos, vestimenta, accesorios y calzados incluidos, como las nuevas y limitadas ediciones explosivas de los icónicos sneakers Galaxy de Bally y el hi-top Hercules.

Con un miembro fundador del movimiento de arte callejero y un científico, Shok-1 eligió tres iconos clave de su catálogo para esta colaboración: pinturas de rayos X con un guiño de la mano, una mosca y «El consumidor«, que simboliza las subculturas de su juventud. Estos motivos se relacionan con las raíces de Bally en la cultura del hip hop cuando artistas como Slick Rick, Doug E Fresco y un joven Kasseem Dean, a.k.a. Swizz Beatz se convirtieron en fanáticos de la marca suiza.

Un seguidor del trabajo de Shok-1, Swizz Beatz vio de inmediato el potencial para una colaboración. «Nuestro enfoque para esta propuesta era explorar el arte de los Rayos X y Shok-1 es un artista, el maestro y una leyenda en su oficio». No hay dudas que la ‘Bally Colectiva, curada por Swizz Beatz‘, continúa con el compromiso de la marca en crear una plataforma y una voz para el arte, a través del talento emergente y establecido.

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