¡El rodillo de jade no puede faltar en tu skincare!

¡El rodillo de jade no puede faltar en tu skincare!

Cada vez es más popular encontrar en nuestros feed videos en los que se nos muestran rutinas de masajes faciales con un accesorio muy particular. El rodillo de jade y de cuarzo rosa se está convirtiendo en la herramienta favorita de los cuidados de belleza y te explicamos por qué.

En el siglo VII las chinas utilizaban estos rodillos para reducir la hinchazón de la cara, drenar las toxinas de la piel e incrementar la circulación de la sangre.

¿Por qué son rodillos de cuarzo rosa y jade?

Muchos expertos aseguran que el jade ayuda con el drenaje linfático, una técnica de masaje que ayuda a que nuestro cuerpo se libre de la retención de líquidos. El uso del rodillo de jade o de cuarzo rosa es como una sesión de gimnasia facial, ya que las propiedades de las piedras junto con los masajes pueden transformar la piel y el contorno facial.

Se recomienda que estos rodillos los conserves en la nevera y los utilices también para aliviar dolores de cabeza y resaca.

¿Cuáles son sus beneficios?

  • Elimina toxinas
  • Mejora la circulación sanguínea
  • Mejora la elasticidad de la piel
  • Promueve el drenaje linfático
  • Reduce la oscuridad debajo de los círculos oculares
  • Relaja
  • Reduce la hinchazón
  • Previene y minimiza las arrugas

Algunos consejos para usarlo

Para realizar un buen masaje en la zona fuera de la nariz, haremos rodar nuestro rodillo de forma ascendente en la frente, las mejillas, la garganta y el área del escote. Luego lo colocamos verticalmente en el área sinusal para hacerlo rodar con suavidad. Para limpiar nuestros senos nasales bloqueados lo alejaremos para finalmente, dedicarnos al área de la mandíbula donde la congestión se acumula más.

Existen otras opciones de rodillos

  • Rodillo de Cuarzo rosa
  • Rodillo de Amatista
  • Rodillo de Obsidiana negra
  • Rodillo de Ágata roja
  • Rodillo de turquesa

Movimientos adecuados para utilizar el rodillo

  • Cuello: ascendente
  • Mentón: desde la barbilla a los extremos
  • Pómulos: desde el surco nasogeniano a la sien, de manera ascendente y oblicua.
  • Contorno de ojos: con dirección ascendente, con fricciones cortas en las zonas de las arrugas.
  • Frente: con dirección ascendente desde la ceja al nacimiento del cabello y de dentro hacia afuera. Con fricciones cortas y profundas sobre las arrugas.
Alexandra Hidalgo
Disfruto del orden que habita en el caos de ahí mi amor por la moda, la fotografía, los libros y mis peleas con lo absurdo.
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