Cuando el arte estalla en lo establecido, cuando el comportamiento ya no está sujeto a reglas duras y firmes, cuando Jean-Michel Basquiat pinta un grafiti en un inmaculado edificio financiero… ¿Lo está profanando o embelleciendo?
Para la colección Otoño Invierno 18 | 19 la diseñadora Elena Ghisellini profana y embellece los modelos icónicos de bolsos y carteras de su marca con elementos que evocan la irreverencia del punk.
Los pernos se injertan en el cuero en un contraste sofisticado con líneas de estilo felino. Nace el nuevo Foxy Bag: un bolso práctico de diseño básico, fácilmente reconocible por un encaje que se convierte en una manija intersectando con la correa del hombro. Es un bolso casual de estilo diario, que se presenta en dos tamaños bien armonizados.
Elena en esta oportunidad explota también la expresión poderosa del color con su variación en la gama de rojos: rojo vivo, rosa, escarlata roja, vino tinto, todos empoderados por un toque de amarillo brillante.
El PVC y el tartán adornan la piel delicada del modelo Ángel como una defensa moderna y colorida del formalismo. La piel arrugada, por su parte, es la forma esencial del modelo Usonia, que está recubierto con los colores preferidos de los estilistas punky punky japoneses. Se presenta también la opción de la piel de leopardo, solo para recordarnos que la mujer es un animal orgulloso y atrevido, un dador de la vida y una fuente constante de encanto.
Irreverencia y emancipación son las palabras clave de la mujer que inspiran a Elena Ghisellini en su nueva colección Otoño Invierno 18 | 19. Una mujer que mira decididamente al futuro, con una buena dosis de ironía y sangre fría. Una mujer que es plenamente consciente de su liderazgo, de su feminidad animal y atrevida, lo que la hace confiar en sus habilidades para seducir.
Sobre Elena Ghisellini
La historia de Elena Ghisellini es la historia de una mujer, de su pasión por la moda, su experiencia, su coraje y su inspiración. La marca toma el nombre de su fundadora, la diseñadora Elena Ghisellini.
Nacida en Génova, el apego a la moda de Elena Ghisellini se desarrolló durante su infancia, convirtiéndose casi en una obsesión. Después de obtener su título en el Instituto Europeo de Diseño, en Roma, inmediatamente comenzó su carrera en Trussardi, una de las mejores casas de moda locales de Italia. Allí aprendió los secretos del arte de la piel, descubriendo la destreza y la excelencia de la artesanía de Italia, y el uso de los mejores materiales.
Ocho años después, trabajó con Salvatore Ferragamo, donde, como jefa de artículos de cuero, obtuvo una perspectiva internacional de estos productos. Doce años de pasión por la artesanía, combinados con un impulso global, la llevaron a emprender un viaje personal, y en 2003 abrió su propio estudio de diseño en Florencia.
Continuó creando bolsos icónicos para marcas reconocidas, incluida Givenchy, pero sobre todo dio vida a la primera colección de la marca Elena Ghisellini.