Luego de los zapatos de pelos, llegaron las botas XXL

Luego de los zapatos de pelos, llegaron al botas XXL

Las botas son y serán los mejores aliados para elevar los looks a su máxima expresión, este calzado puede sustituir a zapatos tan imprescindibles como las sandalias de tacón, pero lo cierto es que además de las tendencias de botas militares, cowboy y las botas altas llegan unas que nos tienen indecisos, te hablamos de las botas altas de pelos.

La mente detrás de estas extravagantes botas montañeras de pelo que tiene tanto adeptos como detractores es la firma Miu Miu, quienes presentaron en su desfile otoño-invierno 2021-22 cómo estas botas acompañaban los atuendos acolchados de inspiración ski chic.

A esta firma italiana le siguió Chanel, quienes secundarían la moción con una propuesta arraigada en la estética del 2000; por su parte Chloé, en colaboración con Moon Boot, hizo lo propio reinterpretando ski, mientras Celine se fue por algo más práctico, solo se quedó con las botas de montaña para el día a día.

Apoyadas como yeti boots, se caracterizan esta temporada por su gran tamaño y sedoso pelo, en el 2000 rompieron récord de ventas y para este año prometen superarse. Estas botas que habían pasado al olvido traerán consigo la era del desquite en las que podrán verse acompañadas de atuendos inclinados a los básicos con este efecto rompedor como en los estilismos más arriesgados.

botas de pelos

Algunas de las celebridades que jugaron y se divirtieron con ellas fueron Kim Kardashian West, Victoria Beckham y algunas de las participantes de Jersey Shore. Para muchos el que está tendencia regrese se convierte en una maravilla, ya que las consideran bellamente horrorosas e ideales para crear todo un universo estético jugando con los límites del buen gusto.

Para aquellas personas que sientan curiosidad por esta tendencia un tanto cuestionable les contamos que pueden iniciarse utilizando zapatos más recatados pero en los que al igual que las yeti boots, tienen como protagonista al pelo.

Alexandra Hidalgo
Disfruto del orden que habita en el caos de ahí mi amor por la moda, la fotografía, los libros y mis peleas con lo absurdo.
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