La ciudad de Nueva York ha servido en muchas ocasiones como inspiración de las colecciones de Carolina Herrera. Fue la primera en dar a conocer sus propuestas en algunos de los lugares más representativos de la ciudad.
Los hoteles Plaza y Pierre, Bryant Park, las carpas del Lincoln Center, el MOMA o el museo de arte Frick han sido algunos de los marcos elegidos para presentar sus diseños, pero no hay ninguno que haya significado tanto para su carrera como el exclusivo Metropolitan Club donde presentó en un evento privado su primera colección compuesta por 20 looks en el año 1981.
Había una banda en vivo que tocaba música de Cole Porter y todo Nueva York estaba ahí: Andy Warhol, Diana Vreeland y C. Z. Guest conversando con Nan Kempner, Jerry Zipkin, Consuelo y Rudi Crespi. Bianca Jagger y Steve Rubell. Esta colección tuvo un éxito inmediato y consiguió el reconocimiento tanto de la crítica como del público. Fue el inicio de la casa Herrera.
Para conmemorar este momento tan importante en su carrera nace el Metropolitan Insignia Clutch. Integrado dentro de la ya indispensable, colección Insignia.
A la hora de imaginar qué diseño encajaría mejor con el ambiente del club y su ornamentada decoración interior creada por Stanford White entre 1893 y 1912, no hubo ninguna duda. Tendría que ser el accesorio perfecto para cualquier evento y el compañero ideal de los célebres gowns y vestidos de cóctel de la diseñadora.
Partiendo de una ligera estructura metálica abrazada por una versión de la pulsera de la que nació todo el proyecto Insignia para conmemorar el 35 aniversario de la marca, se han ido incorporando diferentes materiales inspirados en detalles de las distintas salas del edificio.
La versión más brillante hace referencia a los cristales de las chandeliers en diferentes tonos, la seda pintada a mano a los frescos de la zona más noble y la bordada a los detalles de las cortinas y tapicerías.
Sin embargo, la más llamativa es la que se inspira en las formas que se dibujan en la balaustrada de la escalera principal. Creados de modo totalmente artesanal por las mismas manos que bordan los trajes de luces de los toreros en España, se convierten en las piezas más especiales de la colección.
Según Carolina Herrera, “lo primero que hace a una mujer elegante es la individualidad. No se trata de lo que llevas puesto, sino de cómo lo luces”. Con toda seguridad el Metropolitan Insignia Clutch será el complemento perfecto para brillar con luz propia.
COLECCIÓN INSIGNIA
Carolina Herrera reinventó su logo para una ocasión especial, el 35 aniversario del nacimiento de la marca. Tomando como punto de partida las letras C H, seña de identidad de la casa, erigió un nuevo emblema en el que se fusionó diseño y artesanía. Una insignia que va más allá de las siglas y que conforma una pieza que define e identifica a la marca.
Se trabajó la idea de una imagen casi tridimensional, no plana, creando un nuevo objeto, que dio forma sutilmente a un símbolo inconfundible. La semilla de este proyecto fue una pulsera a partir de la que se crean otros accesorios y colecciones en las que este nuevo emblema es el protagonista indiscutible. Insignia es mucho más que un logotipo, es mucho más que una simple pieza física, es un concepto lleno de significado que se materializa en colecciones con un valor añadido.