Nuestra plataforma de streaming favorita sigue rompiendo corazones con sus anuncios. Esta semana trascendió que Netflix habría cancelado otras dos series populares de su parrilla; en esta ocasión, las desafortunadas son Glow y Teenage Bounty Hunters.
“Netflix ha decidido no terminar de filmar la última temporada de Glow. Nos dieron la libertad creativa para hacer una comedia complicada sobre mujeres y contar sus historias. Y ahora eso se acabó «, dijeron las creadoras de la serie Liz Flahive y Carly Mensch al portal Deadline.
A pesar de que la comedia sobre mujeres luchadoras había sido renovada para una cuarta y última temporada, Netflix explicó que continuar con su grabación durante la pandemia no era viable. Esto se debe a que Glow cuenta con un elenco de más de 20 actores e incluye escenas de lucha física. Este gran número de personas, reunidas en espacios pequeños, supondría exponerse a un alto riesgo de contagio al que Netflix no quiso arriesgarse.
Por su parte, la comedia adolescente Teenage Bounty Hunters también fue cancelada tras solo una temporada. Luego de estrenarse en agosto de este año, la serie encabezó las listas de popularidad de Netflix; además, recibió buenas reseñas por parte de los críticos, quienes le dieron una puntuación de 91% en Rotten Tomatoes.
Con estos números, los fanáticos de la serie esperaban que fuera renovada para una segunda temporada; sin embargo, Netflix decidió lo contrario.
El final de otras historias
Las series The Society y I Am Not Okay With This también fueron canceladas tras apenas una temporada en la plataforma. Las aclamadas Dead to Me y Ozark también corrieron con la misma suerte, pero en una nota más optimista, ya que la decisión habría venido por parte de sus creadores, quienes decidieron terminar sus historias mientras todavía gozan de aceptación y popularidad.
En los últimos años, Netflix ha sido blanco de críticas debido a las cancelaciones repentinas de series que cuentan con las vistas de los usuarios y los elogios de los expertos. Y es que la plataforma se caracteriza por alejarse de la tendencia tradicional de generar series de gran longitud.
Deadline reportó el año pasado que Netflix no ve el valor en shows que sobrepasen los treinta episodios, usualmente dos o tres temporadas. De acuerdo con el portal de Hollywood, este tipo de producciones suelen volverse muy costosas con el tiempo, además de que es difícil conseguir que nuevos usuarios le den una oportunidad.
Al menos, todavía podemos disfrutar de las más recientes novedades de la plataforma.