La lencería es vital para una mujer, tiene algo que nos hace sentirnos guapas y poderosas. Tanto es así que incluso las mostramos en nuestros outfits diarios, pero, la gran pregunta es: ¿Sabemos cuáles son todas esas prendas de lencería? Para responder a la pregunta diseñamos este pequeño glosario:
Babydolls: El famoso picardías de nuestras madres y abuelas ahora se llama así. Camisones sensuales llenos de erotismo para una ocasión especial o para usar a modo de camisón para descansar. Los de transparencias ganan la partida.
Balconet: Se hizo muy popular en el cine de los 60. Es un sujetador hiperfemenino que se caracteriza por tener media copa con lo que deja bastante piel al aire y es perfecto para escotes sugerentes.
Bandeau: El clásico sujetador sin tirantes, también llamado strapless bra. Versátil y útil. Ahora hay más formas, colores y tejidos de este básico en nuestro cajón de lencería.
Bodies: Lencería de calle, e indiscutiblemente de moda para lucirlo en todo tipo de outfits. El body es sexy y elegante, una de las prendas íntimas que más estilizan la figura y la moldean. Los hay de encaje, algodón, transparencias, con todo tipo de escote…
Braguita: Prenda estrella de la ropa íntima femenina y un básico en toda regla. La prenda más cómoda, de todos los tejidos y colores. Las de algodón suelen ser las más usadas; también las hay de un solo uso. No son muy sexys pero es la pieza de lencería de referencia. Las hay de talle alto, medio, tipo bikini…
Brasier: Otra forma de llamar al sujetador, desde el clásico hasta el más llamativo. Aquí entran en juego la talla de contorno, copa, sujeción, forma, escote… Los hay de algodón, encaje o seda, con relleno o sin él, de lactancia, para hacer deporte…
Corpiño o corset: De encaje, con transparencias, más o menos escotados… Los corset siguen imbatibles en cuanto a sensualidad se refiere. Si bien es cierto no es la prenda más esencial de nuestro cajón de lencería, sí es la infalible para sentirnos hermosas y sensuales.
Culottes: A medio camino entre braguita y pantalón corto. Suelen ser muy cómodos si se aprende a llevarlos. Tapa toda la nalga realzándola. Pueden parecer muy básicos pero cada vez hay culottes con diseños más atrevidos y sugerentes.
Liguero: De las piezas más sensuales de la lencería, pero también funcional. A pesar de que el liguero o portaligas se ha convertido en una de las prendas más eróticas y sus diseños atrevidos y sensuales así lo reconocen, realmente es clave para sujetar las medias o pantys por encima de la rodilla.
Multiway: Sujetador con tirantes movibles para adaptar al vestuario sin que se note nada.
Pantys: Las medias. De los básicos más necesarios en la vida de las mujeres. Perfectas para dar color a las piernas, quitar imperfecciones y estar más cómodas. Actualmente las hay de mil colores y tejidos, aunque siguen siendo las nude y negras y sin costuras las más usadas. De algodón o licra, enteras, calcetín o a medio muslo, transparentes o tupidas.
Push up: Sujetador con relleno en la copa bien para hacernos aumentar varias tallas de busto o para moldear un escote más bonito.
Sport Bra: Sujetador adecuado para la práctica deportiva. Hay que tener en cuenta, además de la talla, la sujeción del mismo, esto es clave para que el pecho no sufra si la actividad es de mucho impacto.
Tanga: La prenda íntima más sexy y cómoda, además de ser la más versátil ya que es perfecta para el día a día, pero también para hacer deporte o para lucir un vestido muy ajustado o un pantalón sin marcas. El tanga de hilo suele ser el más usado pero no es el único, está el tanga brasileño y también el string, con los laterales más anchos.
¿Lo tienes todo?