No importa cuán inteligentes seamos, qué tanto carisma tengamos o lo expertos que seamos en nuestras respectivas profesiones. Hay algo que es una verdad universal y es «La primera impresión es la que cuenta» y es que tu imagen habla por ti por eso es importante lograr una comunión entre cómo nos vemos, cómo somos y hasta dónde queremos llegar. Aquí encontrarás algunos tips para lograr proyectar la imagen de éxito que deseas.
Tu apariencia debe sustentar tu posición
Si ostentas un puesto de liderazgo y autoridad, tu imagen personal debe respaldar ese puesto. La ambigüedad en estos ámbitos genera confusión y complican las funciones. Así que asegúrate de tener sentido de la idoneidad según tu tipo de trabajo, lo que usa un artista plástico o un cantante jamás por mucho que nos guste la tendencia es lo mismo que debería usar un directivo de una empresa de seguros, por ejemplo.
Ten claro tu objetivo
Saber qué lucir y cómo conducirte cuando tienes un nivel de madurez es un poco más sencillo cuando te abres paso en el mundo real. Y tener un objetivo claro en mente tampoco lo es, así que para llegar a ello debemos preguntarnos ¿A dónde quiero llegar? ¿Qué me inspira? ¿Cómo quiero que me perciban los demás? Descifrarse uno mismo minuciosamente es el primer paso para una imagen de éxito.
¿Qué tipo de cuerpo tengo? ¿Cómo sacarle provecho?
Reconocer nuestra figura es importante porque de acuerdo a nuestras formas vamos a poder vestir con sentido de idoneidad. Por ejemplo, un hombre delgado logra verse un poco más ancho de pecho si usa corbatas diagonales, una mujer con algo de sobrepeso que trabaje en una oficina y necesite verse profesional y femenina a la vez se vería ideal con un vestido camisero en cuello ‘V’ de escote medio.
Haz un equilibrio entre tus fortalezas y debilidades
Conocer cuál es nuestro lado flaco es una oportunidad de convertirlo en una fortaleza, no en algo que ocultar para fingir lo que no somos. Podemos trabajar en ello al igual que la parte estética, si intentamos ocultar ‘la barriga’ lo más probable es que solo hagamos más énfasis en ella. Pero si buscamos destacar lo que nos gusta y armonizar lo que no, lograrás la imagen que deseas.
El éxito se esconde en los detalles
A veces estar obsesionados con los detalles es algo bueno. Así que no dejes nada sin atender, no importa si estas usando unos Christian Louboutin de la última colección si vas a tener los pies descuidados. Todo importa porque lo más mínimo puede jugar en contra.
Trasmitir tu potencial hacia el exterior es una de esas cosas que lleva tiempo pero nos acerca mucho a nuestras metas ¿Estás dispuesto a dar el 100%?