Saber quiénes somos es fundamental para desarrollar un estilo que nos defina, para ello debemos preguntarnos quiénes somos realmente, qué elementos de nuestra personalidad predominan y qué queremos que el mundo sepa de nosotros la primera vez que nos ve. Si te sientes un ser creativo y vanguardista, estas son las claves de estilo que puedes agregar a tu armario.
Cuando hablamos de un estilo creativo nos referimos a una fuente de innovación, porque quienes pertenecen a este grupo son personas ingeniosas que no le temen a la originalidad, su misma espontaneidad los lleva a experimentar con cosas que otros no se atreverían ni a mirar. Dicho así, si eres tímido podrías pensar que por mucho que te gustaría verte así no es lo tuyo, pero al contrario si te identificas podría ser el contrapunto perfecto para ese rasgo de tu personalidad.
Para lograr looks creativos cualquier cosa que esté dentro del buen gusto vale, cuando decimos esto nos referimos a que nunca olvides tus proporciones y lo que es un mínimo estético. Quienes se sienten atraídos por la creatividad explotan el color, lo llevan a su máxima expresión con el uso del color block en sus prendas, en el cabello o las uñas.
Este estilo además nos permite experimentar con las piezas de cortes asimétricos, que dan originalidad y fuerza a la imagen; el look creativo también apuesta por el talento local porque sabe que puede encontrar piezas únicas y de vanguardia.
La creatividad no le teme a los estampados, por eso no se limita a utilizar uno solo en cada outfit sino que se atreve a combinarlos o sacarle todo el potencial que pueda a las texturas, los accesorios serán siempre poco convencionales. Un estilo creativo nunca sigue las tendencias, sino que juega con ellas, las combina y amolda a su antojo, a veces llegando tan acertadamente lejos que este mix se convierte en una tendencia paralela.
En definitiva, si quieres lograr atuendos que definan la personalidad creativa que posees, lo esencial es quitarte el miedo a ser tú mismo y resaltar e ir probando y mezclando todo aquello que te gusta y que estés complacido con la imagen que proyectas. Recuerda que si ese corte de cabello no funcionó, ya crecerá; si no te gusta cómo te van esos pantalones, los puedes donar. Experimentar es la única opción pero es la más divertida, ¿te animas?