Recetas mexicanas que cocinar al menos una vez en la vida

Recetas mexicanas que cocinar al menos una vez en la vida

La gastronomía mexicana es una de las más ricas no solo por sus sabores sino por su valor cultural, no por nada fue nombrada Patrimonio Cultural Inmaterial de la humanidad, así que como los grandes comensales que somos, tenemos el deber de probar y preparar algunos de estos magníficos platos. ¡Atrévete a preparar estas recetas mexicanas!

Tamales clásicos

Ingredientes

Para el relleno

  • 2 pechugas de pollo desgrasadas.
  • 1 cebolla grande y blanca.
  • 4 Tomates verdes
  • 2 Chiles verdes opcionales.
  • 1 rama Cilantro
  • 1 diente de ajo
  • Sal al gusto

Para la masa

  • 30 Hojas de maíz lavadas (por cada kilo de masa)
  • 1 1/2 tazas Caldo de pollo
  • 2 cucharaditas Polvo de hornear
  • 1 kg Harina de maíz nixtamalizada
  • 1 taza Manteca de cerdo
  • 12 piezas Piel de tomate
  • 1 rollo Pabilo: para amarrar los tamales.
  • Sal al gusto

Preparación

  1. En una cacerola, hervir la piel de tomate con un cuarto de litro de agua. Reservar, sin retirar el agua.
  1. En otra olla, batir la manteca a fuego muy bajo hasta que tome una textura más suave y un color blanquecino.
  2. Verter poco a poco la harina en la olla con manteca, sin dejar de batir, para que se vaya mezclando de manera uniforme. Sumar a la harina el polvo de hornear.
  3. Igualmente, sin dejar de batir la mezcla, incorporar un toque de sal, luego el caldo de pollo, seguido por una taza del agua con la que hirvieron los tomates.
  4. Continuar moviendo la masa para lograr una textura muy suave, pero al mismo tiempo muy consistente. Existen varias formas de probar el punto adecuado: puede ser disponiendo un poco de masa sobre una cuchara, y que al voltearla ésta caiga totalmente al momento, o haciendo una pequeña pelota de la pasta, que al colocarse sobre el agua se mantenga a flote sin diluirse o desintegrarse. Si hace falta suavizar más la masa, puede añadirse agua de cocción de la piel de tomate.
  5. Acomodar las hojas limpias de maíz sobre una mesa, extendiendo cada una con su parte interior hacia arriba.
  6. Colocar al centro de cada hoja una bola de masa, y extender hasta formar una película gruesa sobre el centro de la hoja.
  7. A partir de este punto, necesitaremos también el relleno, así que vamos a ver cómo se prepara.

Preparación del relleno de los tamales

  1. Pelar la cebolla y el ajo. Cortar la primera en unos cuatro u ocho trozos.
  1. Lavar los tomates, el cilantro y los chiles, si es el caso. Cuando se utilizan estos últimos, hay que abrirlos, retirar la vena blanca, y de preferencia también las semillas, a menos que se quiera una salsa muy picante.
  2. En una olla con agua, cocinar a fuego medio los tomates, chiles, cebolla, ajo y pechugas, con un poco de sal, hasta que el pollo se esté cocido.
  3. Separar el pollo y reservar.
  4. Licuar el resto de los ingredientes cocidos (sin el agua), más las hojas del cilantro. Si se desea, se puede incorporar a la licuadora la piel de tomate utilizada para preparar la masa. Si se quiere una salsa más líquida, se puede agregar un poco del agua utilizada para cocer los ingredientes.
  5. Deshebrar la carne de pollo con un par de tenedores, para obtener cintas largas y delgadas.
  6. Tirar los huesos del pollo e incorporar la carne deshebrada a la salsa licuada.
  7. Probar la mezcla, y si hace falta, corregir el gusto con más sal.

Una vez listo el relleno:

  1. Acomodar una porción al centro de cada hoja de maíz cubierta con su respectiva película de masa.
  1. Cubrir el relleno con otro poco de masa, para luego doblar y cerrar la hoja, y finalmente amarrarla.
  2. Acomodar los tamales de forma vertical en una gran olla o vaporera. Cocinar al vapor hasta el punto en el que la hoja ya no se pegue a la masa de los tamales. El proceso toma aproximadamente tres horas, con la olla al vapor tapada.

Chilaquiles

Ingredientes

·  Tortillas de maíz: 10 piezas

·  Pechuga de pollo: una pieza limpia y desgrasada.

·  Salsa roja: un par de tazas.

·  Cebolla blanca: una pieza.

·  Crema de leche: 1/3 de taza.

·  Queso rallado o desmenuzado: una taza (se recomienda queso cotija o feta).

·  Sal.

·  Pimienta negra molida.

·  Aceite vegetal de sabor neutro, como canola, maíz o girasol.

·  Agua.

·  Cilantro: 1/2 taza finamente picado

Preparación

  1. Cocer la pechuga de pollo en agua caliente, con un poco de sal y pimienta, por alrededor de 20 minutos (hasta que la carne pegada al hueso pierda la tonalidad rojiza).
  1. Mientras que se cocina el pollo, cortar las tortillas en tiras o triángulos.
  2. Freír en aceite las tortillas cortadas. Usar sólo el aceite necesario para que se doren y se vuelvan crujientes.
  3. Retirar las tortillas del aceite y depositarlas sobre un plato cubierto con papel absorbente, para quitar el exceso de grasa.
  4. Una vez cocido el pollo, deshebrar la carne con la ayuda de dos tenedores. Reservar.
  5. Calentar la salsa en una cacerola. Normalmente, la salsa de los chilaquiles no tiene una textura espesa, así que se puede diluir con un poquito de agua, cuidando la cantidad para no perder la sazón. Corregir con un poco de sal y pimienta, si es necesario.
  6. Mientras se calienta la salsa, pelar y picar la cebolla en ruedas muy delgadas y luego separar los círculos interiores. Reservar.
  7. Antes de retirar la salsa del fuego, agregarle el pollo y  los trozos de tortilla frita.  La idea es que los trozos se mojen en la salsa, pero sin dejarlos tiempo suficiente para que pierdan su textura crujiente. Mezclar rápidamente.
  8. Servir de inmediato con la ayuda de un cucharón, acomodando en cada plato una porción de salsa con tortillas.
  9. Decorar la porción de cada plato con un poco de crema de leche.
  10. Espolvorear cilantro picado y queso rallado o desmenuzado sobre cada plato.
  11. Terminar la decoración con ruedas delgadas de cebolla, encima de los otros ingredientes.

Mole poblano

Recetas mexicanas que cocinar al menos una vez en la vida

Ingredientes

Pasta mole poblano

  • 7 Chiles anchos
  • 6 Chiles mulatos
  • 6 Chiles pasilla
  • 3 Chiles chipotles
  • 1 Cebolla chica
  • 2-3 Jitomates
  • 3 dientes Ajo
  • 100 g Pasitas
  • 100 g Cacahuate sin sal
  • 100 g Almendras
  • 50 g Semilla de calabaza
  • 50 g Ajonjolí
  • 2 Tortillas duras
  • 1 pza. Bolillo duro
  • 1 Plátano macho, maduro
  • 1 Rajita de canela
  • 3 Clavos de olor
  • ½ cdta Anís
  • ½ cono Piloncillo
  • 1 tableta Chocolate de mesa (Ibarra)
  • 1 L. Agua
  • 2 Pastillas de consomé de verduras
  • 1 cdta. Pimienta negra
  • Aceite de oliva o aguacate
  • Sal de mar

Para la emoladas

  • Tortillas de maíz
  • ¼ kg. Setas
  • ¼ Cebolla en juliana
  • Pimienta negra
  • Sal de mar

Preparación de la Mole

  1. Limpiar y desvenar los chiles. En un comal asar por ambos lados cuidando que no se quemen para evitar amargar la salsa. Una vez asados meterlos a una ollita con suficiente agua hirviendo, dejar remojar por 20 minutos para suavizar. Ya que estén suaves licuar y reservar.
  2. Hervir en otra olla jitomate, cebolla y ajo.
  3. En un sartén con suficiente aceite vegetal dorar los espesantes de la pasta: pasitas, semillas de calabaza, cacahuate, almendras, la tortilla trozada en cuartos, el bolillo en rebanadas y plátano macho en rodajas. Ya que están quemados, licuar junto con la canela, clavo, anís, pimienta, ajonjolí e ir agregando poco a poco agua hasta obtener una mezcla homogénea.
  4. En una cazuela (preferentemente de barro) agregar aceite vegetal, la tableta de chocolate, el piloncillo y las pastillas de consomé vegetal; mover constantemente hasta que se deshagan. Una vez que la consistencia sea liquida agregar la espesura (paso 3) y las salsas de chiles, utilizando un colador. Mezclar muy bien y constantemente las tres partes. Sazonar una vez más si es necesario. No dejar de mover por unos minutos hasta que entre al primer hervor a fuego bajo. (usar de preferencia palita de madera).

Preparación de las enmoladas

  1. En una olla colocar una taza de pasta de mole poblano, agregar media taza de agua o caldo de verduras, mover para integrar y obtener una mole más líquido.

2. En un sartén saltear la cebolla en juliana y las setas picadas o desmenuzadas. Sazonar con sal y pimienta al gusto. Dejar un par de minutos a fuego alto para dorar.

3. Calentar o freír tortillas sin que doren para poder formar unas flautas con las setas.

4. Servir, en un plato acomodar flautas, bañar con suficiente mole, espolvorear con ajonjolí tostado, acompañar con aros de cebolla, aguacate y tofu.

¿Con cuál de estas recetas mexicanas empezarás?

Alexandra Hidalgo
Disfruto del orden que habita en el caos de ahí mi amor por la moda, la fotografía, los libros y mis peleas con lo absurdo.
TendencyBook