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¡Salud por ti, Garnacha! Por Elizabeth Yabrudy

Hoy es el tercer viernes de septiembre, por lo que celebramos el Día Internacional de la Garnacha. Hacemos un brindis por esta tinta española (que también tiene su versión blanca) y una de las uvas más plantadas en el mundo, que produce vinos que reflejan no solamente su personalidad como varietal, sino la expresión del suelo y del cuidado que tanto el viticultor como el enólogo le den.

Se conoce como Grenache Noir en Francia y como Cannonau en Italia. Suele dar origen a caldos de alto volumen alcohólico y buen cuerpo, de acidez y taninos medios, que enamoran a quien los degusta porque sus aromas están bastante asociados a los frutos del bosque, especialmente los rojos, así como a ciertas especias como anís y canela.

La Garnacha es una variedad versátil con la cual se producen diferentes estilos de vinos. El famoso Oz Clark, autor del libro “Grapes & Wines”, define a esta cepa como “The wild woman of wine”. Salvaje pero delicada, es famosa por los rosados que a partir de ella se elaboran tanto en España como en Francia, así como también por algunos varietales tintos jóvenes y afrutados. En algunos casos, cuando se trabaja con parras viejas y de poco rendimiento, da lugar a vinos intensos, más complejos y de larga guarda, en los que florecen ciertas notas de higos, tabaco, cuero y aromas terrosos. Con ella se producen, además, vinos dulces y fortificados.

Si bien es una variedad que puede lucirse por sí misma, es la compañera ideal de muchas otras uvas. En España se mezcla con Tempranillo, Mazuelo (Carignan) y/o Cabernet Sauvignon; en Francia, con Sirah, Carignan y Mourvèdre; en Australia y en Estados Unidos (especialmente en Texas), forma parte de los famosos GSM (Grenache / Shiraz / Mourvèdre).

A la Garnacha le gusta el clima cálido, por lo cual se ha adaptado muy bien en el centro y el sur de España (Priorat, Rioja, Navarra y Campo de Borja), en el sur de Francia (Languedoc-Roussillon, Provenza y el Valle del Ródano), en las islas italianas (Cerdeña y Sicilia), en algunas zonas de Estados Unidos (Valle Central de California, Washington y Texas) y en la región Sur de Australia.

Aunque en Venezuela no se cultiva la Garnacha, en los anaqueles especializados en vino se pueden conseguir algunos ejemplares de esta cepa, bien sean varietales o vinos de corte. Algunos de ellos:

Esperando que los lectores tengan ya su copa servida, brindo entonces por la maravillosa Garnacha.

¡Salud!

Por Elizabeth Yabrudy I.