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Tatuajes convertidos en museos

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Los tatuajes ya son un arte en sí, pero hay veces en que se fusiona con la pintura para crear geniales obras que todos quisiéramos tener en nuestra piel.

La tatuadora surcoreana Zihee tiene una espectacular habilidad para mezclar estas dos corrientes artísticas y plasmar en la piel la obra de famosos pintores de la historia.

Tatuajes como museo

La artista mezcla la pintura con el tatuaje y no importa si se trata de Gustav Klimt, de Vincent Van Gogh, de las meninas de Diego Velázquez o Salvador Dalí. Sus tatuajes no tienen nada que envidiarle a la obra original.

A pesar del tamaño, Zihee no deja fuera ningún detalle; además, tienen la particularidad de que son muy coloridos. ¡Es como si estuvieran impresos en la piel!

Obras de arte en tatuajes

Obras como El sueño de Pablo Picasso o el estilo impresionista de Monet resultan tan hermosos, así como Oficina por la noche de Edward Hopper, no puedes negar que se ven asombrosos.

Si embargo, Zihee no solo se especializa en pinturas famosas también le encanta crear sus propios diseños coloridos.

Tatuajes vibrantes de color

Para adornar el cuerpo de sus clientes no solo realiza obras de arte de grandes pintores de la historia; sus propias creaciones van desde esqueletos coloridos hasta hermosas flores.

La artista coreana posee el poder de captar con mucha precisión los vibrantes colores que se encuentran en la naturaleza.

Diseños que saltan de la piel

Las flores de Zihee imitan colores que se encuentran en esos increíbles días de primavera cuando todo está tan soleado que la naturaleza misma adquiere un efecto pictórico.

A diferencia de los tatuajes de estilos tradicionales, estos tatuajes carecen de cualquier contorno en negro; tanto así, que las flores parecen que pueden flotar en la piel del portador.

Desde minúsculos tatuajes decorando partes del cuerpo inesperadas como el contorno de la oreja, hasta piezas que cubren toda la espalda, el trabajo de Zihee tiene una cualidad soñadora que evoca a la fantasía, pero aun así sus diseños saltan de la piel con mucho carácter.

¿Quién quiere ir a Corea del Sur por un tatuaje?