La ósmosis inversa es una tecnología de purificación del agua que utiliza una membrana semipermeable para eliminar iones, moléculas y partículas más grandes en el agua potable. Para lograr la ósmosis inversa se aplica una presión para vencer la presión osmótica, que es una propiedad coligativa producida por diferencias de potencial químico del solvente, un parámetro termodinámico.
La ósmosis inversa puede eliminar muchos tipos de elementos suspendidos en el agua, incluyendo bacterias, y está utilizada tanto en procesos industriales como para la producción de agua potable. El resultado es que la disolución es retenida del lado presurizado de la membrana y el solvente puro puede pasar al otro lado. Para lograr la «selectividad», esta membrana no debe dejar pasar iones o moléculas grandes a través de sus poros (o agujeros), pero debe dejar pasar libremente componentes más pequeños de la solución (como las moléculas solventes).
Existen diferentes formas de purificar el agua, pero en la actualidad la más efectiva y sencilla es mediante la ósmosis inversa. Es la más utilizada por su bajo coste y alta eficiencia.
Además, requiere muy poco mantenimiento. Este método es muy efectivo tanto para uso doméstico como comercial para obtener agua pura.
¿Por qué tener un sistema de osmosis inversa?
1. Agua de calidad. Proporciona un agua de mineralización débil o muy débil, recomendada por los mejores médicos especialistas.
2. Salud. El agua osmotizada es ideal para…
- Beber y cocinar, ya que permite que los alimentos conserven sus propiedades, nutrientes y todo su sabor
- Favorecer la eliminación de toxinas, la digestión y es diurética
- Preparar los biberones de tu bebé
- Personas con dietas pobres en sodio, problemas renales o cólicos
- Que no obligues a tus riñones a trabajar en exceso
- Alimentación infantil y mujeres embarazadas o en periodo de lactancia
- Personas con diabetes, osteoporosis o en personas con hipertensión arterial, por su eliminación de sustancias nocivas
- El café y las infusiones con todo su sabor, cremosidad y aroma
- Mascotas
3. Comodidad. Elimina la necesidad de cargar, transportar y almacenar botellas y/o garrafas de agua. A la hora de cocinar, es mucho más fácil y rápida su cocción. Ten tu propio grifo en casa, como si de un manantial se tratase.
4. Sin micro-plásticos. Eliminando la necesidad de comprar agua embotellada, favoreciendo la sostenibilidad del medio ambiente. ¿Sabías que una botella de plástico tarda más de 500 años en descomponerse? Los micro-plásticos no son buenos ni para ti, ni para el medio ambiente.
5. Seguridad. Gracias a no contener elementos químicos perjudiciales ni bacterias ni micro-plásticos.
6. Ahorro. Conseguirás ahorrar a corto plazo dejando de comprar agua embotellada, realizando una cocción más rápida de sus alimentos, ahorrando considerablemente en electricidad o gas, realizando así una inversión para ti y tu familia.
Información tomada de Wikipedia.