Todos alguna vez nos hemos enganchado con una serie, bien sea porque nos sentimos identificados con el personaje protagonista o con la historia, o simplemente porque el tema nos pone a pensar o nos da risa. Muchos personajes odiados son aquellos que no nos terminan de gustar en aquellas series que más vemos y nos atrapan.
ARTURITO – LA CASA DE PAPEL
¿Hay alguien a quién le caiga bien este personaje? Durante toda la serie ha demostrado, no sólo ser un cobarde empedernido, sino que además podemos considerarlo una mala persona. Tan sólo habría que ver la historia amorosa con Mónica para saber lo desagradable que puede ser.
SKYLER WHITE – BREAKING BAD
Anna Gunn fue la actriz que interpretó este personaje, y llegó a molestarse por el odio que la esposa de Walter White causaba en los seguidores de la serie. La actriz hasta llegó a escribir una carta reflexiva en el New York Times, asegurando que ese odio provenía de una percepción misógina popular sobre cómo una esposa debe comportarse en relación a su marido, a pesar de que sea uno de los peores criminales.
MARNIE MICHAELS – GIRLS
Allison Williams encaró el personaje en la serie de Lena Dunham, y de las cuatro protagonistas los seguidores se turnaban para no respaldar a Marnie. Si de personajes odiados habamos, Marnie era un buen ejemplo. Era juzgada por tener tendencias a tomar malas decisiones y a no saber enfrentarse al mundo real desde su burbuja de niña blanca privilegiada. El Chicago Tribune, en un artículo, llegó a decir que seguramente puso a muchas espectadoras frente a un espejo, y eso no gustó.
LORI GRIMES – THE WALKING DEAD
Lori Grimes fue la esposa del protagonista Rick Grimes, un personaje que realmente sí puso en peligro al grupo de supervivientes varias veces al no querer aceptar la realidad de la situación en la que estaban metidos. Muchos fanáticos de la serie la odiaron y no estaban de acuerdo con sus tomas de decisiones.
PIPER CHAPMAN – ORANGE IS THE NEW BLACK
Muchos se preguntaban, viendo esta serie cargada de diversos y atractivos personajes, cómo es que Chapman pudiese ser la protagonista. Encarada por la actriz Taylor Schilling, su personaje, según la revista Decider, puede llegar a ser el personaje más odiado de la televisión americana. Desde su perspectiva de blanca privilegiada, sus problemas decaían ante la difícil vida de todas las reclusas de la prisión, tanto así que su protagonismo se fue perdiendo a medida que las temporadas avanzaban.