Escoger un nuevo perfume es una decisión complicada, su aroma debería definirnos pero cuando nos aventuramos a salir de la rutina y darle a nuestra identidad un nuevo olor debemos hacerlo con inteligencia.
La casa Thierry Mugler tiene un ángel que será la solución a tus problemas; es raro echar a la basura un frasco después de que su líquido se haya acabado, es como si doliera ver algo tan bello junto a cosas comunes; Angel es el segundo perfume más vendido en Europa y la primera fragancia que ofrece refill.
Extracto de frutos rojos, miel, vainilla, naranjas, algodón de azúcar, caramelo y chocolate son los componentes que mezclados con un toque de pachuli hacen de Angel una fragancia dulce fuera de lo normal que destaca con su fugaz personalidad, haciendo parecer predecibles a las fragancias conservadoras.
Thierry Mugler dio nombre a esta fragancia futurista alegando que un ángel debe ir contra la corriente, volar sobre sus propias opiniones, no dejar el misterio de lado, y teniendo en cuenta que “un angel puede ser bueno o malo” explicó Monsieur Mugler.
El elegante empaque que resguarda el intenso olor dulce, es una estrella de cristal azul cielo con cinco puntas asimétricas que son pulidas manualmente para permitir a sus clientes la posibilidad de rellenarlos. La casa Mugler autorizo a casas de perfumes exponer en sus tiendas plateadas fuentes ovaladas llenas de la fragancia, para que funcionasen como expendedores de la fragancia, proporcionando una alternativa distintiva y convirtiendo a Angel en una joya imposible de tirar.