Cuando se trata de hacer turismo por España es inevitable tener una extensa lista de ciudades y provincias que visitar, Valladolid encabeza definitivamente esta lista. Es un lugar cargado de historia, con una gran riqueza cultural y entrañables escenas que tejen algunas de las costumbres más mágicas del país.
Valladolid le regala a sus visitantes la huella de los caballeros y sus magníficos castillos hasta un estómago contento por tan exquisita gastronomía, luego tenemos el vino y las huellas literarias de un territorio que esconde maravillosas sorpresas.
Hay mucho qué hacer en Valladolid, tanto por descubrir, degustar y aprender. No dejes de visitarlo, te prometemos amor a primera vista.
¿Qué vamos a encontrar en Valladolid?
Es un viaje en el tiempo arraigado en el futuro, pues todavía podemos ver las fortalezas de origen romano, baluartes que aún recuerdan las sangrientas batallas, en su tierra vibraban los pasos de nobles caballeros de notable poderío. Pero sin lugar a dudas, lo que deja con la boca abierta y el corazón latiendo a tope son sus magníficos castillos.
Esta ciudad es la que mayor concentración de estas edificaciones conserva, muchos de ellos fueron construidos en tiempos de la Reconquista para garantizar la posesión del territorio; otros, fueron el fruto de las disputas de León y Castilla. Nombrarlos todos sería algo que llevaría muchas horas, pero como todo en esta vida hay unos que han robado el corazón de sus habitantes y de los turistas.
Empezamos con el de Montealegre, que sirvió de escenario para que Charlton Heston protagonizara El Cid, luego pasamos por el de Fuensaldaña, donde los Reyes Católicos pasaron noches de gran pasión después de la boda; Peñafiel es el símbolo de la provincia junto con un inmenso barco anclado a la meseta.
Otro punto que no puede faltar a la hora de visitar son los palomares, esta es una de las construcciones más populares de Valladolid, su belleza rústica sirvió en su momento para complementar la economía familiar con la cría de pichones. Luego nos encontramos con las iglesias, la de San Cebrián de Mazote, Santa María de Wamba y los monasterios soberbios además de la Santa Espina son lugares obligatorios para conocer.
Finalmente, no podemos caminar tanto sin contemplar una parada para degustar unas deliciosas tapas en Valladolid, para aquellos que no pierden la buena costumbre de alimentarse como se debe, cuentan con una aplicación ‘Donde comer sano’ donde encontrarán múltiples opciones sostenibles y saludables para tomar fuerzas y seguir turisteando.