Melissa Meier es una artista brasileña que utiliza diferentes disciplinas artísticas para sus creaciones, fusionando la escultura, la fotografía e incluso las instalaciones; estas creaciones obtienen un resultado totalmente fuera de órbita, como todo arte surrealista.
Esta artista es reconocida internacionalmente por sus evocadoras instalaciones tridimensionales, esculturas de objetos encontrados, collages y fotografías.
Arte surrealista fusionado con todas las artes
Serie glass-eyed 
Serie pieles
En la serie «glass-eyed», Meier explora el poder y el efecto de las máscaras estáticas hechas a mano en entornos abstractos y cotidianos. La artista explora el efecto que causa el uso de máscaras artesanales en entornos abstractos y cotidianos.
Por otro lado, en su serie actual “pieles”, Meier ha creado híbridos de ropa escultural, utilizando materiales naturales como hojas, piedras, piel, cáscaras de huevo, trigo, arroz, cristales, escamas, palos, plumas, piñas y conchas.
Inspiración japonesa, rituales y cultura
“A veces, los temas requieren mucho tiempo para gestarse y eso es lo que encuentro tan intrigante de la creación: justo cuando crees que has explorado todos los lados, se hace un nuevo descubrimiento personal.
Las máscaras son una forma de disfraz, ritual, entretenimiento e incluso protección, y quería expandir mi exploración esculpiendo máscaras de gran tamaño en arcilla y dándoles vida usando ojos de vidrio, pintura y manos humanas, todo en una variedad de escenarios”, relata Meier.
Carnavales brasileños y nativos fusionados con arte surrealista
Serie pieles 
Serie pieles
Sin embargo, para la serie “pieles” Inspirada en el carnaval brasileño y los caminantes de piel de los nativos americanos, sus construcciones portátiles combinan el empoderamiento femenino con una mitología de creación propia, desarrollando en torno a la idea de culturas antiguas de guerreras, ejemplificando la fuerza, la belleza y la unidad de la vida vivida en armonía con los elementos.
Los trajes se desarrollan en esculturas móviles y portátiles que cobran vida como obras de arte de performance, sirven como esculturas independientes y, en su forma documentada final, como fotografías de archivo de bellas artes.
Aquí es donde la obra de Melissa Meier crea un puente hacia el presente y nos permite conectarnos y encontrarnos reflejados en sus imágenes de culturas escondidas, atesoradas, heroínas y guías espirituales, imaginadas y reales.
