El delineador de blanco sigue vigente este verano

El delineador de blanco sigue vigente este verano

Seamos honestos aún no hemos tenido suficiente del delineador blanco, desde hace un par de meses dejamos de utilizar nuestro lápiz blanco como complemento de un maquillaje ahumado o súper cargado, ahora lo asociamos a un look fresco divertido y sobre todo con clase.

Esta temporada nuestro delineador negro se tomó un merecido descanso, dejando el lugar libre a los colores más vibrantes y alegres como  los azules, fucsia, amarillo o violetas logrando resaltar nuestra mirada, algo que se volvió justo y necesario por el uso de las mascarillas

La gran ventaja de esta tendencia es que con un pequeño trazo logramos una mirada abierta y radiante que además agranda nuestro ojo y nos da una nueva expresión, ¿no es genial?

¿Aún no sabes utilizar el delineador?

Este simple lápiz pasó mucho tiempo pasando desapercibido pero ya no más, pues vamos a poder aplicarlo de diversas maneras, primero podemos intentarlo como base bien pegado al rabillo del ojo, luego probar a aplicarlo debajo de la cejas para hacer resaltar la zona.

Ahora otra combinación infalible es el estilo flotante o combinarlo con su antagonista el negro para lograr un look más refrescante pero con la mirada rasgada. Sin duda, las más arriesgadas están probando hacer un trio de color que da un aire de fantasía urbano que va a ser inevitable mirar dos veces para tomar nota.

¿Quién puede usar esta tendencia?

La buena noticia es que no importa la edad que tengamos, vamos a poder hacernos con un maravilloso delineador blanco, pero si piensas que puede ser un poquito demasiado para ti, puedes dibujar una V difuminada en la parte inferior del ojo y el lagrimal, el efecto visual será como aplicar reflectores a tu mirada.

Como hemos estado diciendo el delineador blanco es la opción ideal para probar algo nuevo y que además sea versátil, como te mostramos su aplicación puede ser elegancia pura o diversión sin control. ¿Te animas a probarlo?

Alexandra Hidalgo
Disfruto del orden que habita en el caos de ahí mi amor por la moda, la fotografía, los libros y mis peleas con lo absurdo.
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