Estas son algunas claves organizadas por pares para que recorras y disfrutes el mundo de las cervezas artesanales:
- Estilos y recetas. En el mundo de la cerveza hay estilos específicos como el de las Indian Pale Ale en los que sabemos lo que podemos esperar: más lúpulo, más amargor y más alcohol, en líneas generales; así como podemos pensar en una lager y su amargor moderado y su alcohol bajo. Pero justamente el gusto en las cervezas artesanales es el de las recetas de cada maestro cervecero que puede hacer ajustes, desde los muy sutiles a los muy notorios para moldear un estilo a su intención y su marca.
- Color e intensidad. Basta hacer un paseo muy breve por el mundo de la cerveza para darse cuenta que una cerveza más oscura no es necesariamente la más intensa. Volvemos con el tema de las IPA, una cerveza en ese estilo puede tener colores dorados y ambarinos y ser muy potente, por encima de un estilo oscuro como dunkel e igual de intensa que una stout o una porter. Por esto es mejor consultar la teoría sobre los estilos y no sacar conclusiones sólo por el color.
- Alcohol y ocasiones de consumo. Si bien puede haber variaciones, para nosotros el alcohol es un elemento fundamental para la ocasión de consumo. Cervezas artesanales con bajos niveles de alcohol, que suelen estar asociados con la posibilidad de servirla muy fría, son perfectas para el aperitivo, solas o con ensaladas y otros platos ligeros. A partir de allí las posibilidades son múltiples, desde rubias como lagers fuertes, American e Indian Pale Ale que pueden ir muy bien con platos con carnes blancas, algunas rojas y embutidos solos o con salsas cremosas o Red Ales con platos especiados e incluso picantes. Las porter y las stout son muy agradables con postres de chocolate o ellas mismas como postre. En paralelo, estilos como los frutales belgas son perfectos para tomar solos o con diversas picadas, así como otros estilos de cerveza que por sus sabores particulares se disfrutan mejor solos para poder apreciar todos sus matices.