Mary Quant la mujer que nos dio las mini faldas

Mary Quant es una diseñadora londinense a quien se le atribuye la responsabilidad de la popularización de las boutiques de moda moderna y la pieza que revolucionó a una década dándole una voz trasgresora a las mujeres, sí, estamos hablando de la minifalda.

Quant es considerada junto con los Beatles como una de las máximas representantes de la modernidad inglesa y del Swinging London. Nacida en Londres en 1934, se crió con padres profesores, por lo que no le sorprendió a su círculo que decidiera estudiar para ser maestra en el Goldsmiths College de la universidad de Londres. Allí conoció a quien iba a ser su marido y socio, Alexander Plunket Greene.

Mary Quant la mujer que nos dio las mini faldas

En 1955 abrió junto a su esposo una tienda situada en King’s Road, en el barrio londinense de Chelsea. El éxito que generó aquel espacio fue un claro indicativo de la necesidad de cambio que se vivía para la época, las nuevas generaciones buscaban dejar la guerra atrás y abrazar la vida y todo lo que tuviera para ofrecer.

La diseñadora dio sus primeros pasos en la moda vendiendo la ropa de otros, pero pronto empezó a elaborar sus propios diseños, adaptando estampados de papel y reinventado el uso de tejidos y colores. Se encargaba de confeccionar vestidos durante el día para luego venderlos por la tarde y con ello ganaba el dinero que destinaba para comprar las telas de las prendas del día siguiente.

Mary Quant la mujer que nos dio las mini faldas

Sus prendas estaban pensadas para favorecer la libertad del movimiento inspirándose en la ropa infantil y la de danza; con ello logró definir el ‘look sixties’ que se compuso de calcetines que llegaban a las rodillas, pichis y faldas cortas, leotardos o estampado de cuadros. Su mayor logro fue popularizar la mini falda.

Quant siempre quiso que sus creaciones llegaran a todos los estratos sociales, por lo que lanzó una línea low cost llamada Mary Quant for Ginger Group, que se comercializó especialmente en Estados Unidos. Con este movimiento empresarial de la mano de la firma J.C. Penney, logró hacerse muy popular en el país norteamericano.

En 1966 culminó su proceso de diversificación lanzando una línea cosmética que llevaba como logo una margarita, siendo un símbolo inequívoco de la época. Ese mismo año obtuvo el título Oficial de la Orden del Imperio Británico, que recibió utilizando una minifalda.

En el 2000 se retira de la moda conservando su residencia en Londres, se calcula que al menos siete  millones de mujeres en todo el mundo conservan en su armario alguna pieza de la diseñadora. En el 2019 el Museo Victoria & Albert de Londres le dedicó una retrospectiva en la cual la muestra recogía un amplio espectro del trabajo de la diseñadora. “Nos centramos en ese contexto histórico y social (del Londres de postguerra). Cuando ella abrió su tienda hacía solo un año que se había acabado el racionamiento en Londres y sus diseños coloridos y juguetones son una reacción contra esa austeridad ” contaba Stephanie Wood al diario The Guardian.

Luego en el 2020 recibe la distinción de “Amiga de Oro” de la Asociación Amigos del Museo de Traje, distinción que reconoció por primera vez a Hubert de Givenchy en 2014.

Alexandra Hidalgo
Disfruto del orden que habita en el caos de ahí mi amor por la moda, la fotografía, los libros y mis peleas con lo absurdo.
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