Comenzar el año siempre es un buen momento para pensar en cómo mejorar el rendimiento económico de lo que hacemos.
Ahora bien, hay que tener presente que la productividad económica es una consecuencia de la productividad personal.
Y cuando hablamos de productividad es bueno recordar 2 aspectos claves:
Primero, no se trata de una carrera de 100 metros planos, sino un maratón de 42K en el cual cada paso cuenta, por pequeño que parezca.
Segundo, la productividad personal implica mejorar o cambiar hábitos de trabajo. Lo cual significa un reto de constancia y disciplina.
En tal sentido, te propongo estas oportunidades para comenzar a mejorar tu productividad en el corto plazo, de manera que tengas un excelente 2022:
1. Establece tus metas
El trabajo sin propósito es sólo trabajo. Las personas productivas saben qué hacer, pero sobre todo saben por qué y para qué lo hacen. Establecen metas en el largo plazo y sus metas inmediatas apoyan su objetivo final.
Esto les permite no distraerse, ni desanimarse con las adversidades, ni ser esclavos de sus rutinas.
Recuerda que tus metas son el punto de partida clave para mejorar tu productividad.
2. Diseña planes y sistemas
Las personas productivas saben que quieren construir una reputación de éxito. Pero también están conscientes de que deben diseñar un plan y un sistema de trabajo para lograrlo.
Muchos tienen metas, pero comprometerse con un plan concreto hace la diferencia en el logro de las mismas.
Un plan y un sistema de trabajo bien diseñado siempre nos facilita ser más productivos.
3. Utiliza tus metas para tomar decisiones
Las indecisiones en los proyectos nos paralizan y afectan emocionalmente.
En la mayoría de los casos las indecisiones nacen de la falta de metas claras o en el olvido de las mismas. Así que siempre podemos detenernos frente a cada decisión para analizar su impacto en nuestras metas más importantes.
Recordar o actualizar las metas facilita tomar decisiones.
4. Cultiva el espíritu de la autosuperación
Avanzar hacia las metas es un esfuerzo que requiere de optimismo y confianza en las capacidades propias, especialmente en tiempos adversos. Por eso la gente productiva es perseverante y constante con sus proyectos.
La productividad requiere de una actitud de auto-superación. Y la vía con más probabilidades para alcanzar tus metas es la del esfuerzo diario.
5. Enfócate en lo que controlas
Las personas productivas saben que la suerte tiene un papel en su éxito, pero no esperan por ella. Saben que en el camino que se han trazado para alcanzar sus metas hay aspectos y obstáculos que no controlan.
Sin embargo, también están conscientes de que donde tienen más poder frente a las adversidades es en enfocar su energía en las variables que sí controlan y pueden cambiar.
6. Aprende rápido de los errores
Las personas más productivas siempre están aprendiendo. Sin complejos, se ven como aprendices permanentes.
Esto significa que construyen respuestas mientras experimentan y prueban nuevas maneras de hacer las cosas. Es la forma concreta de beneficiarse de los errores.
Buscar aprender rápido de los errores es una actitud que los conduce a mejorar con cada iniciativa, realizar verdaderos avances y concretar innovaciones, aunque parezcan pequeñas.
7. Concéntrate en tu plan
Hacer las cosas mejor que el promedio requiere foco y concentración. Hay quienes valoran la “multitarea”, pero la realidad nos demuestra que no funciona porque diluye nuestras fuerzas y nos dispersa.
No hay mérito en hacer muchas cosas a la vez de forma mediocre. Y cuando nos enfocamos en nuestro plan de trabajo nuestro esfuerzo rinde más porque la energía se enfoca mejor.
8. Trabaja en equipo
Los buenos equipos ganan porque sus miembros están dispuestos a ayudar a los otros en función del éxito colectivo. Es algo que aprenden y practican. En los equipos más productivos sus integrantes se ayudan mutuamente, con consciencia, no por obligación. Conocen sus roles y alinean sus metas personales hacia el éxito del equipo.
Así mismo, las personas más productivas encuentran satisfacción en ayudar a otras personas a tener éxito.
Si solo te enfocas en ti siempre estarás solo y así es más difícil mejorar el rendimiento de tu esfuerzo.
9. Solicita ayuda con respeto
Cuando estamos envueltos en tareas dispersas y sin foco, pedimos ayuda por necesidad y con urgencia, sin considerar las circunstancias del otro.
Sin embargo, las personas productivas piden ayuda porque respetan y valoran las capacidades de los demás, y lo hacen con inteligencia emocional. Se rodean de personas en las que confían porque dan y reciben motivación.
El respeto mutuo es el fundamento de toda relación efectiva y productiva.
10. Practica hacer pausas
Con disciplina y metodología, las pausas contribuyen a aumentar la productividad. Unas veces son pausas breves, otras veces un poco más largas. El cerebro, las emociones y el cuerpo necesitan reponer la energía. El trabajo diario genera estrés.
Es su naturaleza. Pero las pausas nos permiten respirar mejor y recargar la motivación.
Muchas veces nos sentimos estancados o poco creativos y esos son síntomas de la necesidad de hacer un alto para refrescar la perspectiva y ampliar las oportunidades.
¿Qué te parecen estas ideas para mejorar tu productividad personal?
¿Qué otra estrategia agregarías?