Desarrollar tu inteligencia emocional es fundamental para que tus comunicaciones sean más efectivas, porque te facilita conectarte mejor con tus clientes.
También es un poderoso recurso para la gerencia efectiva de las adversidades, porque nos ayuda a tener respuestas más estratégicas y menos impulsivas.
La inteligencia emocional se refiere a la capacidad de comprender nuestras emociones y las de los demás, en función de guiar positivamente nuestros procesos de pensamiento, decisiones y acciones.
El concepto fue propuesto en 1990 por los psicólogos norteamericanos Peter Salovey y John Mayer. Pero Daniel Goleman lo popularizó con su libro Inteligencia Emocional, publicado en 1995.
A manera de síntesis, puedes estimular y desarrollar tu inteligencia emocional ejercitando las siguientes habilidades:
1. La auto-conciencia emocional
Significa conocer lo que se siente, el porqué y los sentimientos que ayudan o perjudican lo que se está tratando de hacer.
También implica conocer las fortalezas y las debilidades, en función de aprovechar las primeras y aprender a superar las segundas.
2. El auto-control emocional
Es la capacidad de mantenernos calmados estando bajo presión y de recuperarnos rápidamente de los disgustos.
Supone saber balancear los sentimientos en función de lograr sentirnos con más seguridad frente a las adversidades.
3. La disposición de adaptarnos
Se refiere a nuestra actitud hacia las ideas nuevas, o diferentes, o hasta contrarias a nuestras creencias.
Significa que, a pesar de las molestias por sentirnos obligados a cambiar, somos capaces de considerarlo y asumir los retos que implica.
4. La orientación al logro
Tiene que ver con el sentido que le damos a lo que hacemos. Si no nos orientamos al logro nos volvemos indiferentes a los resultados.
Cuando nos orientamos al logro nos interesa el mejoramiento continuo y disfrutamos la búsqueda constante de hacer mejor las cosas.
5. Buscar perspectivas positivas
Nos permite retroalimentar nuestra resiliencia y establecer las bases emocionales necesarias para detectar oportunidades y aprovecharlas.
No se trata de positivismo a ciegas e implica un gran esfuerzo, para no paralizarnos en momentos de angustia o asumir una actitud depresiva.
6. Ejercitar la empatía con constancia
Significa que tenemos la conciencia social necesaria para leer e interpretar las emociones de los otros sin encerrarnos en nuestros prejuicios.
La empatía es tomar el tiempo necesario para entender lo que dicen los otros y cómo se sienten, aunque no estemos de acuerdo.
7. Conciencia del valor del equipo
Denota la comprensión de las emocionales y la dinámica dentro de una organización, en función de promover su sinergia.
Supone una visión de las relaciones que se orienta más al logro que al poder, y pone énfasis en descubrir coincidencias y promover acuerdos.
8. Buscar influir positivamente
Involucra la idea de que siempre podemos hacer una diferencia positiva en la vida de los demás con nuestros actos.
Es asumir el reto de estar más atentos de nosotros mismos para que nuestros gestos hacia otros, aunque luzcan pequeños, sean edificantes.
9. Impulsar el aprendizaje activo
Se refiere a una actitud que inspira en los demás querer saber mas de las cosas. Y en el caso de la comunicación efectiva significa querer saber más de las verdaderas necesidades de los clientes para ayudarlos con eficacia.
En tal sentido, utiliza la comunicación para motivar a las personas a querer ver más allá de los aspectos más obvios.
10. El manejo del conflicto
Implica entender que siempre vamos a encontrar ideas o situaciones que nos desagradan y retan nuestra inteligencia emocional.
Por lo tanto, nos conviene aprender a ver los conflictos como situaciones predecibles y prepararnos para que no nos sorprendan o nos afecten menos, especialmente los más frecuentes.
Las oportunidades están en practicar
Todos podemos desarrollar estas habilidades, ejercitándolas con disciplina y constancia. Poco a poco, pero con consistencia.
Cada avance que logres desarrollando estas habilidades, por pequeño que parezca, siempre significa un mejoramiento en tus relaciones laborales o privadas.
La inteligencia emocional tiene un impacto muy alto en las comunicaciones relacionadas con atender clientes, vender, liderazgo y ser padres. Así que ocuparse de su mejoramiento es una excelente inversión.