En muchos países del mundo se celebra cada 5 de septiembre el Día del Hermano, para rendirle homenaje a uno de nuestros familiares más cercanos. Este día se conmemora principalmente por la fecha de fallecimiento de la Madre Teresa de Calcuta, quien se dedicó en vida a realizar varias obras sociales por todo el planeta.
Nacida en Albania y más tarde naturalizada en la India, esta mujer fue la fundadora de la congregación de las Misioneras de la Caridad en Calcuta en 1950, todo con el fin de llevar paz y sosiego junto a sus hermanas. Este día no solo abarca a los hermanos de sangre, sino también a aquellos que lo son por elección.
¿Hay algo mejor que molestar a un hermano? No lo creemos; por ello, para generar más recuerdos divertidos, te dejamos una serie de bromas que gastarle a tu querido hermano en su día.
Ataque sorpresa en el clóset
Si aún vives con tu hermano o van a pasar un fin de semana en familia, esta broma puede ser de las mejores que hacerle. Para ello está atento a su hora de llegada y escóndete en tu propio clóset y una vez dentro llama por el móvil y pídele que busque o verifique alguna cosa en él y cuando lo abra, da tu grito de guerra.
Crema batida en el rostro
Es una de las bromas más clásicas de la historia pero es una que nunca falla: cuando tu hermano se duerma y tenga alguna de las palmas de las manos hacia afuera, vierte crema batida o de afeitar muy delicadamente y luego acaricia su cara con una pluma.
Un pastel de esponjas
Coge una esponja y cúbrela con glaseado, chocolate, grajeas o cualquiera de los dulces favoritos de tu hermano. Déjala en un lugar inadvertido de la cocina, tal vez encima del microondas o incluso en el refrigerador haciendo que parezca que es “tu” pedazo de pastel y no quieres que nadie más lo toque. Con algo de paciencia oirás sus gritos confusos.