Un perfume de edición limitada que se convirtió en uno de los más exclusivos del mundo por guardar un pequeño secreto… la durabilidad.
Todo empieza en el 2014, cuando Baccarat celebró su aniversario 250, para conmemorar la fecha, se alió con Maison Francis Kurkdjian para crear una fragancia que fuese una edición limitada pero que por azares de la vida se ha convertido en uno de los aromas más deseados del mundo, llevándolo a ser el más importante de la línea principal de MFK, Baccarat Rouge 540.
Las notas que se perciben en él, son una fusión de jazmín, almizcle, azafrán, cedro y ámbar gris, además aunado al experto y fundador de MKF, quien es considerado una de las narices más famosas de la actualidad hicieron de este perfume un culto.
¿Qué tiene de especial?
Además del motivo de su creación, la exquisitez del aroma y el concepto que gira en torno a esta fragancia, también es vital mencionar que está conformada por otras piezas históricas y detalles que despiertan sensaciones en aquellos afortunados en olerlo.
Sus creadores no esperaron que se volviera una fragancia tan iconica para la marca en tantos países, si bien es cierto que consta de una fórmula única que combina siete ingredientes y tres acordes tiene un no sé qué especial.
El trabajo de este perfumero de padres armenios pero nacido en París, es el artífice de ese «Je ne sais pas que» pues todos los críticos coinciden y expertos en perfumes lo describen como ‘una acertada y hábil composición, y la curiosa combinación de un carácter sensual, pero relajado’ y todo esto encapsulado en un frasco.
Todo buen perfume tiene un envoltorio icónico…
Y este perfume no iba a ser menos, su botella está inspirada en el nombre que a su vez, es un tributo a la técnica que se inventó en 1847 con las que se elaboran las botellas Baccarat de cristal tallado color escarlata de edición limitada, para ello se realizaron solo 250 y fueron diseñadas por el maestro de la talla de diamante del cristal, Georges Chevalier.
Otro hecho importante alrededor de Baccarat Rouge 540 es que es una fragancia unisex que podemos encontrar en su emblemática presentación de MFK de 70ml, por un valor de 570 dólares.
La promesa de este perfume es su autenticidad a la hora de hacernos una carta olfativa de presentación y su durabilidad pues no es una fragancia que se pierda fácilmente.